Insomnio en niños y adolescentes. Documento de consenso An Pediatr (Barc). 2016
G. Pin Arboledas1, V. Soto Insuga2, M.J. Jurado Luque3, C. Fernández Gomariz4, I. Hidalgo Vicario5, A. Lluch Roselló6, P.J. Rodríguez Hernández7, J.A. Madrid8
1Asociación Española de Pediatría (AEP), 2Sociedad Española de Neuropediatría (SENP), 3Sociedad Española de Sueño (SES), 4Fundación Prandi, Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria (SEPEAP), 5Sociedad Española de Medicina de la Adolescencia (SEMA), 6Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria (SEPEAP), 7Sociedad Española de Psiquiatría Infantil (SPI), 8Laboratorio de Cronobiología, Universidad de Murcia, Murcia, España Resumen El insomnio es una patología muy frecuente en edad pediátrica (30% en niños menores de 5 años) que ocasiona una grave repercusión cognitiva, emocional y en el aprendizaje, junto con una importante comorbilidad médica y afectación de la calidad de vida del niño y la familia. La formación de los pediatras en el diagnóstico y el tratamiento del mismo suele ser deficitaria. Por todo ello, se presenta el documento de consenso sobre el manejo del insomnio en la infancia y la adolescencia elaborado por representantes de la Asociación Española de Pediatría, la Sociedad Española de Sueño, la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y de Atención Primaria, la Sociedad Española de Medicina de la Adolescencia, la Sociedad Española de Psiquiatría Infantil y la Sociedad Española de Neurología Pediátrica. Este grupo recomienda que el diagnóstico debe ser clínico y solo en los casos dudosos o en que sea necesario un diagnóstico diferencial serán necesarias pruebas complementarias. Asimismo el tratamiento se debe basar principalmente en terapias cognitivo-conductuales y en una modificación de los hábitos de sueño. El uso de medicamentos y sustancias para facilitar el sueño es elevado, aunque no existen guías clínicas que lo apoyen. Publicado en: An Pediatr (Barc). 2016. http://dx.doi.org/10.1016/j.anpedi.2016.06.005 Pediatr Integral 2017; XXI (2): 130 –139